Se llama Jules Mugisha y es de Burundi. Tiene dos másteres en ciencias y gestión medioambiental integrada por la Universidad de Burundi y en nutrición, seguridad alimentaria y cambio climático por el Instituto de Ciencias de la Nutrición de África Oriental (EANSI). El entorno en el que creció se ve muy afectado por los efectos del cambio climático (inundaciones, corrimientos de tierras, enfermedades relacionadas con el clima, alteración del calendario estacional, erosión y residuos asociados, irregularidades en las precipitaciones, impacto en los niños, etc.). Por ello, se ha inscrito en UN CC:e-Learn, para conocer mejor las cuestiones relacionadas con el cambio climático y los actores implicados en este sector, así como las formas de atenuar los efectos del cambio climático y adaptarse a ellos.
Estos cursos de formación en UN CC:e-Learn me permitieron ser seleccionada como formadora en el Centro Internacional de Formación e Investigación para el Medio Ambiente y el Desarrollo Sostenible (CIFREDD).
Su trabajo como formadores en el CIFREDD comenzó en febrero de 2024. El objetivo general de los cursos de formación es ayudar a desarrollar las capacidades de diversas personas y talentos para que puedan contribuir más a la promoción del desarrollo sostenible y a la lucha contra la deforestación, la degradación de los bosques y el cambio climático. Se basa en módulos relativos a las políticas, convenios y negociaciones internacionales sobre medio ambiente; la gestión de riesgos y catástrofes climáticas, así como los retos medioambientales en el mundo y en Burundi: cambio climático, deforestación y pérdida de biodiversidad. El CIFREDD ya ha impartido más de 300 cursos de formación a jóvenes y talentos en el ámbito del desarrollo sostenible y la protección del medio ambiente.
El contenido de los cursos UN CC:Learn que he aprendido me ha ayudado mucho, sobre todo a preparar diferentes módulos de enseñanza estableciendo objetivos de aprendizaje claros, asegurándome de que la formación es pertinente para las necesidades de los alumnos y asegurándome de que son capaces de aprovechar al máximo los recursos de que disponen.
Además de formador, se dedicó entonces a sensibilizar a los jóvenes para que se implicaran en la lucha contra el cambio climático, en particular plantando árboles forestales y frutales, protegiendo el medio ambiente y regenerando las especies locales en vías de extinción. Por eso fundó una organización no gubernamental llamada Coalición Burundesa Juventud Medio Ambiente (CBJE) para alcanzar estos objetivos lo antes posible.
Con los conocimientos que adquirió en UN CC:e-Learn, pudo comprender que los efectos del cambio climático provocan diversos fenómenos como inundaciones, irregularidades en las precipitaciones, corrimientos de tierras, enfermedades relacionadas con el clima, brotes de plagas, erosión y residuos asociados, sequía, alteración del calendario estacional, impacto en los niños, cambios en los patrones epidemiológicos, enfermedades de las plantas, extinción de especies, así como fuertes vientos y tormentas.
Dado que una gran parte de la población burundesa, sobre todo la que vive en torno a las orillas del lago Tanganica, está afectada por las inundaciones, nos pareció necesario, en primer lugar, sensibilizar a la población para que despejara las zonas inundadas con el fin de proteger a la población, sobre todo a los niños y las mujeres, de morir ahogados.
Otra acción muy importante es que la CBJE ha empezado a trabajar recientemente en asociación con el centro de medicina tradicional de Buta, situado en el sur de Burundi. Este centro es famoso por la calidad de sus tratamientos a base de plantas locales con propiedades curativas demostradas. El CBJE se encarga de identificar, multiplicar y plantar estas especies medicinales, que desgraciadamente están al borde de la extinción en varias partes del país debido al cambio climático y a una explotación excesiva. La organización también está concienciando a la población local de la necesidad de domesticar estas especies en sus propios campos en forma de agrosilvicultura, que tiene un impacto muy positivo en la fertilidad del suelo, la lucha contra la erosión y la gestión de la tierra.
El CBJE prepara viveros y suministra plantones a la población local para animarla a cultivarlos en casa. La organización también sensibiliza y ayuda a plantar árboles frutales para combatir la inseguridad alimentaria provocada por el cambio climático.
El mayor impacto del CBJE es que ya se han plantado 2.000 árboles forestales y 1.400 árboles frutales bajo su supervisión y de momento van muy bien. La gente está empezando a plantar especies medicinales a gran escala en lugar de perturbar lo poco que queda en nuestros bosques naturales, y estamos orgullosos de ello.
Esta iniciativa contribuye a reducir las desigualdades sociales mejorando los medios de subsistencia de las comunidades locales, haciendo especial hincapié en la implicación y la participación activa de los jóvenes, las mujeres, los indígenas y los curanderos tradicionales. En conclusión, está convencido de que todas estas acciones son y serán extremadamente beneficiosas en términos de mitigación, adaptación y resiliencia frente al cambio climático.
Comience su aprendizaje:
Únase a Jules y a otros cientos de estudiantes y empiece a aprender hoy mismo:
- Cambio Climático: del Aprendizaje a la Acción
- Salud humana y cambio climático
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- Los niños y el cambio climático
*Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no reflejan necesariamente las políticas o posiciones oficiales de las Naciones Unidas o de cualquiera de sus organizaciones afiliadas.